Luces LED

Iluminación residencial: Técnicamente, adopta una eficiencia lumínica media-baja (80-100 lm/W) y un brillo medio (300-3000 lúmenes), con luz blanca cálida (2700K-4000K) como temperatura de color principal, y el índice de reproducción cromática (CRI≥80) cumple con la reproducción diaria del color. El diseño estructural es ligero y sencillo, normalmente con una carcasa de plástico y un disipador de calor sencillo, y el nivel de protección sólo necesita IP20 (a prueba de polvo básico), y la vida útil es de unas 25.000-40.000 horas.

Iluminación comercial: Con una eficacia luminosa de media a alta (120-150 lm/W) y un elevado flujo luminoso (5000 - 10000 lúmenes), las principales ventajas son un alto índice de reproducción cromática (CRI ≥ 90) y una temperatura de color flexible (2700K-6500K ajustable), que garantizan la presentación real de los colores ambientales. La estructura utiliza disipación térmica de aluminio y lentes ópticas optimizadas, y el nivel de protección aumenta a IP20-IP44 (a prueba de polvo y salpicaduras), con una vida útil de más de 50.000 horas. El sistema inteligente está altamente integrado, con atenuación DALI/0-10V, sensores humanos/luz de serie y un estricto sistema antideslumbramiento para reducir la fatiga del personal.

Iluminación industrial: Los LED industriales representan lo último en rendimiento y durabilidad. La eficiencia luminosa alcanza 130-200 lm/W, el brillo puede llegar a 10.000-100.000+ lúmenes, la temperatura de color es principalmente luz blanca fría de alta alerta (5000K-6500K), y el CRI ≥ 70 (≥ 80 en zonas clave). El diseño estructural es una carcasa de aluminio fundido a presión de alta resistencia + aletas disipadoras de calor, con un nivel de protección IP65/IP66+ (antiagua/polvo a alta presión), y una vida útil de incluso 100.000 horas. La tecnología central es la tolerancia ambiental extrema: la temperatura de funcionamiento oscila entre -40°C y 75°C, y lleva incorporado un revestimiento antivibraciones y anticorrosión química (aceite/ácido y álcali).